Escribió: ROSARIO FERRO
Había un payaso,
curioso, curioso
que tenía un perro
tarado, tarado y
rabioso, rabioso.
En la puerta de la escuela
cantaba, cantaba
y vio una casa en la cuadra
destrozada, destrozada.
Y fue hasta allí a ver
Lo que pasaba y
bailando, bailando
llegó hasta la casa.
Justo había un policía
caminando por allá y
lo vio al payaso que
iba a abrir la puerta.
El payaso se fue
corriendo, corriendo
y lo agarró al payaso
y lo metió a la cárcel
para preguntarle.
El payaso aprendió
Que ser curioso no
era lo mejor.
FIN
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